Índice Testimonio de Tortura de José Luís Moreno
Borbolla
"No había investigación de inteligencia", afirma el ex
guerrillero Moreno Borbolla
Detenciones
de la DFS en los 70 y 80, porque arrancaba datos bajo tortura
JESUS RAMIREZ
CUEVAS/III
La primera semana de mayo de
1975, Juan Escamilla Escobedo fue detenido por agentes de la Dirección
Federal de Seguridad (DFS). Después de varios días de tortura en el Campo
Militar número Uno, los policías lo amarraron a la base de un helicóptero y
lo pasearon bajo amenaza de arrojarlo desde el aire si no "confesaba".
La policía se ensañó con él
porque pertenecía al Comité de Impresión de la Brigada Roja de la Liga
Comunista 23 de Septiembre, responsable de editar Madera, su órgano
de difusión. Sometido a indecibles suplicios, Escamilla "ubicó" el domicilio
de la imprenta clandestina, donde la policía detuvo a cuatro militantes más.
Una fotografía suya de ese
momento aparece en el expediente de la Dirección General de Policía y
Tránsito del Distrito Federal (DGPTDF), obtenido por La Jornada. A su
ficha se suman las de otros 23 militantes de la Liga detenidos entre abril y
agosto de 1975.
Algunos de ellos fueron
capturados en acciones armadas o de propaganda; otros fueron "señalados" por
sus compañeros en las torturas. Todos vivieron el infierno de la guerra
sucia y la crueldad de la Brigada Blanca, que tenía carta abierta para
matar, vejar y desaparecer.
De los 27 guerrilleros
fichados en el legajo oficial, sólo 14 llegaron a prisión. Se trata del
último grupo de la liga que fue encarcelado. A partir de ese momento, sólo
11 militantes más de esa organización fueron procesados y juzgados conforme
a derecho; el resto murieron o fueron desaparecidos, como 10 de los
registrados en el documento.
Punto de quiebre
Antes de exponer sus casos,
es importante dar el contexto. La liga surgió en marzo de 1973, de la
confluencia de distintos grupos clandestinos que compartían el
cuestionamiento a la izquierda tradicional, la lucha armada como vía para
lograr una revolución socialista y la necesidad de construir una
organización nacional.
Pero hacia mediados de 1975,
la liga vivía un fuerte debate interno, entre otros temas por las críticas
al militarismo y el divorcio con los sectores a los que pretendían
organizar. Sobrevino la fractura de varios grupos. Explica José Luis Moreno
Borbolla, quien fue de la Brigada Roja: la Fracción Bolchevique, encabezada
por Estela, hermana de Raúl Ramos Zavala; Vinculación Partidaria,
identificada con Carlos Salcedo, y la Brigada Revolucionaria Emiliano
Zapata, que rompen con la liga. Y los que sostienen el proyecto original,
dirigidos por David Jiménez Sarmiento, Adolfo Lozano y Miguel Angel Barraza,
entre otros.
Del otro lado, el gobierno
mexicano había decidido el aniquilamiento de la guerrilla y la acción de la
policía política se volvió más cruenta.
Como la liga estaba
organizada en células compartimentadas, cada militante sólo conocía parte de
la organización. Si caía detenido, únicamente podía dar referencias de su
célula y de algún contacto más.
Según Moreno Borbolla, "la
DFS nunca hizo una investigación rigurosa de inteligencia. Lograba
detenciones de compañeros en algún operativo y les arrancaba
información bajo tortura".
La cadena de detenciones y
muertes
Del análisis del archivo de
la DGPT y de otros informes oficiales se desprenden los procedimientos
ilegales utilizados por la Brigada Blanca.
El 24 de abril de 1975, en
la calle de Coruña, tras un enfrentamiento, la DFS detuvo a Ignacio Abel
Chávez Velázquez. En la tortura "confiesa" la ubicación de dos militantes de
la Fracción Bolchevique: Carlos Gómez Conde, radiotécnico de 25 años de
edad, y Víctor Manuel Mendoza Sánchez, empleado de 19 años. Los tres cayeron
por separado.
Al día siguiente, un comando
de la Brigada Roja de la liga, encabezado por David Jiménez Sarmiento,
asaltó la sucursal del Banco de Comercio en Villa Coapa. En el
enfrentamiento murieron ocho policías y tres civiles.
Ahí resultó herido Antonio
Licenco Licea Verdugo, estudiante del Politécnico, de 23 años, capturado
después de una espectacular persecución. Torturado a pesar de sus heridas,
Licenco "ubica" a Juan Escamilla Escobedo, ingeniero civil del Poli,
y a José Luis Moreno Borbolla, alumno de esa institución.
Juan Escamilla fue detenido
por la DFS en su domicilio legal. El capitán Luis de la Barreda, director de
la DFS, escribió en un informe, fechado el 7 de mayo: "al continuarse con el
interrogatorio a Juan Escamilla (se refiere a la tortura y al viaje en
helicóptero), proporcionó datos sobre una casa del Centro de Propaganda".
Ese día, agentes de la DFS
sitiaron ese domicilio, ubicado en el municipio de Atizapán, estado de
México. Luego de un intenso tiroteo "fueron detenidos Jorge Manuel Torres
Cedillo (de 24 años, estudiante de ingeniería mecánica en el IPN), su esposa
María Trinidad León Zempoalteca (de 22 años, alumna de medicina en el
Politécnico), Nora Martínez Watanabe (19 años, estudiante del
CCH-Azcapotzalco) y David Jiménez Fragoso (impresor)", reporta De la
Barreda. Ahí la DFS decomisó una imprenta, mimeógrafos y propaganda de la
liga.
"Desde su captura, todos los
detenidos fueron torturados. A María Trinidad, embarazada, la golpearon
salvajemente, frente a su esposo Manuel Torres -identificado como 'director
del Comité de Impresión de la Brigada Roja'-, y los amenazaron con quitarles
a sus hijos" (uno de tres meses y otro de año y medio), cuenta José Luis
Moreno.
Al día siguiente, el jefe de
la DFS registró las "declaraciones" de Manuel Torres, Norma Martínez y David
Jiménez Ramiro. De la Barreda reseña cómo ingresaron a la organización,
identifica a ocho de sus dirigentes y describe su estructura en el Distrito
Federal: "el órgano de dirección y supremo es el Consejo de Redacción; le
sigue en grado inferior, como coordinador general de las actividades, David
Jiménez Sarmiento, quien controla la dirección local, compuesta por un
elemento de cada uno los comités (el Norte, subdividido en dos, el Poniente
y el Oriente)".
David Jiménez trabajó 15
años como impresor y fotógrafo en la empresa Moore-Bussines, pero perdió la
mano derecha en un accidente. Según el informe de Luis de la Barreda, "al
ser reclutado por su hijo David Jiménez Sarmiento, se dedicó a todas las
labores referentes a la impresión, fotografía de negativos y procesado de
offset de la propaganda de la Liga Comunista 23 de Septiembre". El
detallado informe, fechado el 8 de mayo, dice que recibía "clases de
marxismo y preparación de tipo subversivo y guerrillero".
Jiménez Fragoso ayudó a la
liga a instalar varias imprentas en el Distrito Federal y en Guadalajara.
Enseñó su manejo a los responsables y colaboró en la impresión de Madera
(del número cinco al 11). De la Barreda consigna que la DFS trasladó a
Ramiro a la capital tapatía, para identificar al Comité de Impresión de esa
ciudad. Ahí murieron cinco guerrilleros al enfrentar a la policía. Ubica
otra imprenta clandestina donde fue detenido David Zaragoza Jiménez y seis
de sus familiares (Zaragoza y Ramiro fueron trasladados a la ciudad de
México).
Según el expediente de la
DGPT, David Jiménez también dio la dirección de una casa de seguridad en
Morelos, donde la DFS detuvo por error al albañil Arcadio Iturbide Hernández
y a Ricardo Ocampo Moronati, dueño de una tlapalería.
"Parecía que terminaba esta
secuela, porque la cadena de esos compañeros hasta ahí llegaba. Pero sucede
que la primera semana de junio Alfredo Tecla Parra entró a un centro
comercial y le descubrieron el bulto de la pistola. Creyendo que estaba
robando mercancía, lo detuvieron después de un enfrentamiento", relata José
Luis Moreno.
En la tortura, Tecla Parra -según
informe de la DFS- "denuncia" a Manuel Anzaldo Meneses (no formaba parte de
la liga, pero buscaba integrarse). La policía tortura de forma terrible a
Manuel, a su esposa y a su hijo recién nacido, a quien cuelgan de los pies (Amnistía
Internacional documentó este caso), y éste delata la cita que tenía con
Adolfo Lozano Pérez. El 15 de junio de 1975, Lozano y Teresa Hernández,
esposa de David Jiménez Sarmiento -ambos miembros del Comité Militar de la
liga- mueren en un enfrentamiento con la DFS en Ciudad Universitaria.
Todos estos guerrilleros
detenidos fueron consignados el 19 de junio a la Penitenciaría de Lecumberri.
La única excepción fue David Jiménez Fragoso, quien sigue desaparecido.
Moreno Borbolla denuncia que "la DFS lo tomó como rehén por ser el padre de
uno de los dirigentes de la liga. Miguel Nazar Haro cumplió su amenaza y los
otros 10 compañeros que aparecen en el expediente de la DGPT fueron
desaparecidos, como muchos más que cayeron después".
Fuente: La Jornada